La gestión del tiempo en época de estudios es muy importante especialmente para evitar episodios de estrés que pueden impactar negativamente en nuestro bienestar y en los resultados de los exámenes. En época de exámenes es importante ayudar a nuestros hijos/as a crear unos hábitos de estudio y unos hábitos personales, es decir, incidir en una buena organización y planificación de su tiempo de estudio combinado con una correcta gestión de la alimentación, el descanso y el tiempo libre.
El Departamento de Orientación Psicopedagógica de la Escuela Lleó XIII es el órgano de la Escuela que tiene como función principal ofrecer recursos a los profesores así como ofrecer soporte al alumnado y a las familias del centro. En el post de hoy compartimos con vosotros diferentes recomendaciones y técnicas de estudio que pueden ayudar a pequeños y jóvenes a organizarse y adquirir un buen hábito de estudio.
Recomendaciones para ayudar a organizarnos los deberes
En el momento de organizarnos es importante tener en cuenta diferentes aspectos:
1. Lugar de estudio
Es conveniente siempre trabajar en el mismo espacio para crear nuestro lugar de estudio. A poder ser tiene que ser un lugar donde podamos trabajar tranquilamente y sin interferencias como la televisión o la presencia de otros familiares jugando, etc. que tenga una luz natural y una buena ventilación, así como un mobiliario adecuado para poder estudiar cómodamente. Es bueno tener o crear este lugar como un espacio de referencia para el estudio y para hacer los deberes.
Antes de ponerte a trabajar hay que aprovechar para ir al baño, parar el móvil o dejarlo en otra sala, preparar todo el material que necesitaremos para hacer la actividad, organizar el lugar de trabajo… Sobre la mesa solo tiene que haber lo que uno necesita para trabajar.
2. Tiempo que dedicaré al estudio
Antes de empezar a estudiar es necesario planificar las franjas horarias que diariamente dedicaré al estudio. Este tiempo puede planificarse una parte por la mañana y otra parte por la tarde en caso de fines de semana, por ejemplo, o todo concentrado en una franja horaria vaya mejor y teniendo en cuenta el momento en que uno está más activado. Los más pequeños normalmente tienen la mente descansada y rinden más; y por la tarde sin embargo están más cansados.
Referente al tiempo, conviene estructurarse el trabajo en sesiones de 45 minutos, después es bueno desconectar durante 10 minutos y volver a ponerse. Es necesario hacer pausas para estirar las piernas, mirar a lo lejos…
Hay que recordar la importancia de una alimentación sana, de tener una buena higiene de sueño para estar descansado y de hacer ejercicio diario. La actividad física antes de estudiar ayuda a activar nuestra mente y a estar más receptivo en el estudio. Por otro lado, tener un bueno planning de trabajo y ciertas rutinas como vestirnos, cuidar la higiene, mantener un horario, etc. como si fuéramos a la escuela favorece la adquisición del hábito de estudio.
3. Por dónde empezar
Es importante establecer un plan de trabajo REALISTA (tengo que poder aplicarlo), PERSONAL (adaptado a mis circunstancias) y MODIFICABLE (si es necesario he de poder cambiarlo). Cuando lo tenga listo, lo puedo revisar haciéndome la siguiente pregunta: ¿realmente lo puedo cumplir? Si es necesario haré ajustes.
Si tenemos más de un examen el tiempo que dedicaré a cada asignatura depende del grado de dificultad que me represente. Conviene alternar asignaturas que a uno le son más complicadas con otras que son más fáciles o nos gustan más.
Con esos alumnos/as a los que les cuesta concentrarse y que son muy inquietos, sobre todo para los más pequeños, se recomienda focalizar los esfuerzos en aquellas materias más complicadas a primera hora de la mañana, y después intercalarlas con ejercicio físico, así como fraccionar los trabajos más costosos en diferentes días y no concentrarlos todos en un mismo día.
Técnicas de estudio
Las técnicas de estudio son herramientas que facilitan el proceso de estudio y que pueden aplicarse indistintamente en cualquier nivel de estudios: desde la Primaria hasta la Universidad.
Ayudarse de técnicas y recursos adecuados y de una planificación y organización del timepo de trabajo nos ayudará a ser más eficaces en nuestro trabajo. Es importante recordar que es inútil hablar de técnicas de estudio si primero no hay hábito de trabajo.
A continuación, se presenta una selección de técnicas de estudio útiles y eficaces para el estudio. No hay una técnica mejor que otra, o que la sustituya. Son complementarias y su uso depende de la asignatura que estemos trabajando, como está estructurada y qué técnica nos ayuda mejor a nosotros a procesar la información.
1. La lectura
Es la herramienta principal en el estudio: es necesario saber cuál es el proceso para leer activamente, observar si se tiene algún defecto de lectura, conocer la velocidad lectora, las palabras guía y los signos de puntuación que actúan de indicadores en la lectura de un texto. Para hacer una buena lectura es necesaria concentración y tener unos objetivos claros que puede ser buscar una información concreta, seguir unas instrucciones, placer o aprender, entre otros…
2. Técnica de subrayado
Una de las técnicas de estudio más sencillas, cómodas y eficaces consiste en subrayar las partes más importantes de un temario. Simplemente se trata de ir destacando, mientras uno va leyendo o en una segunda lectura, las partes más significativas del texto utilizando marcadores fluorescentes de diferentes colores. Una forma ideal de proceder es hacer primero una lectura comprensiva y subrayar el más notable, para posteriormente, comenzar el estudio.
3. Esquemas o mapas conceptuales
Otra técnica clásica consiste en la creación de un esquema o mapa mental, de forma manuscrita o mediante el ordenador, para resumir y organizar nuestras ideas. Las principales ventajas de estas técnicas son: ayuda a interrelacionar los diferentes conceptos y conocimientos, principales y secundarios, nos ayuda a dar una visión global de lo aprendido, favoreciendo la consolidación de los nuevos conocimientos y por lo tanto de su recuerdo, y como consecuencia a posteriori representa un ahorro de horas de estudio.
4. El Resumen
Otra técnica útil y clásica consiste en escribir brevemente las ideas centrales de un texto y reorganizarlas personalmente con tus propias palabras.
5. Fichas de estudio
Las fichas de estudio son un método un poco más laborioso, pero muy eficaz para materias como Historia, Química o Geografía porque permiten asimilar datos concretos, fechas, nombres o vocabulario. Existen aplicaciones informáticas gratuitas de calidad para facilitar la elaboración de fichas.
6. Reglas mnemotécnicas
Las reglas mnemotécnicas son especialmente útiles para memorizar listas y conjuntos. Su funcionamiento es básicamente el siguiente: se asocian conceptos que hemos de memorizar con otros que nos son más familiares.
Según como uno procesa la información, le van mejor unas técnicas u otras. Es necesario ir descubriendo, con la práctica y de forma progresiva, cuáles nos ayudan más. Aprender a aprender supone un camino de autoconocimiento, toma de conciencia y reflexión, y sobre todo práctica.
Así que ánimos y ¡¡a practicar!!